La miga de pan mágica

A veces no solo es cuestión de ahorrar, sino simplemente de salir del paso ante una situación inesperada ...

Las nueve de la noche, y - se me permita la redundancia - una noche de perros, con lluvia, viento, rayos y truenos ... y el angelito de la casa que me llega deshecho en un mar de lágrimas porque ¡ No encuentra su goma de borrar !!
Vamos, la situación idónea para salir al centro comercial a comprar una mísera goma de borrar ;)

Así las cosas, me vino a la cabeza una imagen de mi infancia en que mi madre en la misma situación, me enseñó que con una simple miga de pan amasada podía borrarse cualquier trazo de lápiz o carboncillo.

Dicho y hecho, y aunque no las tenía todas conmigo, probé nuevamente aquel mágico truco de la infancia y con sorpresa volví a ver como los trazos de lápiz desaparecían ante mis ojos como por arte de magia ...

Ya no es el valor de la goma de borrar, es el tener la constancia de que hay otros recursos además de los que nos ofrecen los centros comerciales, para solventar estos pequeños inconvenientes que surgen en la vida diaria.